Primero que todo ¿Sabes qué son los ODS? ¿Sabes a qué tiempo están planteados estos objetivos?
Bueno imagínate que estos Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) hacen parte de la estrategia global establecida por la Asamblea General de las Naciones Unidas para lograr un futuro mejor y más sostenible para todos. Se pretende alcanzar varios de estos para 2030 y así de acuerdo a los resultados definir la agenda de metas para el resto de este siglo.
Cada día que pasa consumimos más recursos, generamos más estrés a los ecosistemas del planeta con la contaminación y crece el efecto de estos impactos generando consecuencias en nuestras familias y entornos.
Los líderes de EatCloud hace 20 años vienen entendiendo como el sector alimentos es una industria clave para la transformación de la sociedad hacia la sostenibilidad y con el desarrollo de nuestra app, que viene operando hace 3 años, venimos conectando el ecosistema alimentario con organizaciones sociales para generar abundancia, representar a Colombia con una startup de carácter mundial y generando impactos positivos en el medio ambiente.
Esta vez te compartimos la transcripción de momentos clave de nuestra intervención en el programa Capacítate de Colombia productiva.
Colombia Productiva fue creada por el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo en el año 2008 con el fin de promover la productividad y competitividad en la industria. Tiene como propósito ser uno de los brazos ejecutores de la Política Industrial del país.
Moderado por: Rafael Isidro Parra Peña. Vicepresidente de Agroindustria de Colombia Productiva.
Evento: Capacítate de Colombia Productiva
Temas: innovación, emprendimiento, trazabilidad, transformación digital, aprovechamiento de desperdicios de alimentos.
Redes:
IG @jorgecorreat
iN @jorgecorreat
Transcripción intervención Jorge Correa:
EatCloud es una startup de triple impacto que reduce el desperdicio de alimentos ahorrándole mucho dinero a la industria, combate el hambre y ayuda al medio ambiente
Comenzamos hace 20 años a automatizar las operaciones comerciales de los grandes jugadores de consumo masivo. Les ayudábamos a vender con aplicaciones móviles que transmitían datos, conectaban sistemas y les permitían tomar buenas decisiones basados en información en tiempo real.
Empezamos a encontrarnos con el tema de la merma operativa, viendo como pequeños, medianos y grandes volúmenes de alimentos debían ser retirados de los puntos de venta por que no cumplían los estándares para ser vendidos o estaban cerca de su fecha de vencimiento y salían entonces con aviso de destrucción, eran tirados a la basura porque obedecían a un gran riesgo reputacional. Para la industria de alimentos es muy complejo tener la trazabilidad de los alimentos atomizados por todo el territorio nacional y a veces es más sencillo que estos alimentos se destruyan, pero lo cierto es que muchos son aptos para el consumo humano. Y esto alimenta un problema gigante, en el mundo se tiran a la basura más de un tercio de los alimentos que se producen esto le cuesta más de un trillón de dólares asociados en gran parte al costo logístico del desperdicio (transporte, almacenamiento y disposición final de los desperdicios) y todo esto tiene un gran efecto en el medioambiente y también nace una gran oportunidad asociada a mitigar el hambre en un mundo donde 1 de cada diez personas se acuesta con hambre (ODS 2: hambre cero)
A nosotros nos pareció alarmante que coexisten dos problemas: el desperdicio de alimentos y el hambre. Solo con los alimentos que se tiran a la basura en América Latina se podrían alimentar 300 millones de personas al año. Lo cierto es que un amplio porcentaje de estos alimentos pueden ser recuperados a partir de un ejercicio de trazabilidad y era básicamente lo que llevábamos haciendo durante 20 años.
Decidimos hacer algo entonces desde las posibilidades que ofrece la tecnología y creamos a EatCloud una plataforma digital que le ayuda al ecosistema alimentario a aprovechar sus excedentes evitando que se tiren a la basura, es decir convertimos este costoso problema de la merma en una gran oportunidad de generar valor económico, social y ambiental no sólo para la industria de alimentos, sino también para un ecosistema donde están nuestros grandes héroes o jugadores sociales.
Conectamos la oferta y la demanda de excedentes alimentarios. De un lado tenemos a supermercados, tiendas, hoteles, restaurantes, plataformas digitales, canales institucionales y próximamente activaremos productores agrícolas. Y del otro lado tenemos a nuestros ecosistemas sociales: bancos de alimentos y fundaciones que atienden población vulnerable canalizando estos alimentos hacía quién más lo necesita. Nosotros actuamos entonces como un puente entre estos excedentes y quienes más los necesitan.
En este ecosistema también empiezan a jugar parte muy importante otros jugadores como es el caso de instituciones de gobierno que están empezando a promover prácticas de innovación y transformación digital en ecosistemas alimentarios de cara a prevenir o a reducir el desperdicio de alimentos y también a alinear estos esfuerzos con políticas públicas que ya nos van a mover como industria y como país a mitigar el impacto del desperdicio de alimentos.
Nosotros en una primera fase entonces nos enfocamos en rescate de mermas para consumo humano en estas verticales del ecosistema alimentario. No obstante desde la misma plataforma teniendo en cuenta que ya estamos en puntos de venta y plantas de nuestros clientes, que ya hemos capacitado su personal y que ya hemos automatizado ejercicios de micro y macrologística de reversa, empezaremos a avanzar hacia una ruta de #zerowaste donde también rescataremos mermas aptas para el consumo animal, compostaje, energías limpias y material de empaque. Impactando más ODS y generando cambios importantes transformacionales en nuestros clientes que rompen algunas estructuras y nos permiten avanzar hacia los ODS.
Continúa viendo el resto de la intervención en el video a continuación desde el minuto 1:17:20 O haciendo clic en este enlace.